El lenguaje es un sistema de símbolos, es decir, un conjunto de sonidos y escrituras con sentido, amoldados a una determinada articulación interna. Sirve para afirmar o negar (oraciones aseverativas), expresar deseos (oraciones desiderativas), formular preguntas (oraciones interrogativas), expresar sorpresa o admiración (oraciones exclamativas o admirativas) e indicar exhortación, mandato o prohibición (oraciones exhortativas o imperativas).
La lógica sólo toma en cuenta las oraciones aseverativas, que son las que pueden constituir proposiciones. La proposición es una oración aseverativa la cual tiene un valor verdadero o falso.
Algunos ejemplos:
A. La Universidad Distrital es un claustro de educación superior.
B. En las universidades privadas se paga muy poco dinero de matricula.
Estas oraciones son oraciones aseverativas y por lo tanto son proposiciones porque pueden ser tanto verdaderas como falsas.
En las demás oraciones no podemos establecer su verdad o su falsedad o su falsedad, y por esto no pueden ser consideradas proposiciones.
En conclusión:
Para que una expresión lingüística sea proposición debe cumplir con estos requisitos:
1. Ser oración.
2. Ser oración aseverativa, y
3. Ser o bien verdadera o bien falsa.
lunes, 23 de noviembre de 2009
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